martes, 17 de enero de 2017

El juego del muelle. La ruleta sexual

De amplia repercusión mediática en estas últimas fechas, lo único cierto sobre el tema es que especialistas coinciden en que se trata de un hecho excepcional y muy puntual entre jóvenes.

Este "juego" importado de países como Colombia o Brasil y en los que se practica desde hace años,, conocido también entre los adolescentes como "ruleta sexual", conlleva una serie de peligros además de los aparejados al consumo de drogas y alcohol entre sus practicantes, pues pocas personas en un estado normal suele prestarse a estas actividades.


A través de un vídeo que circula por la aplicación whatsapp entre los jóvenes, grabado supuestamente en un piso de Fuenlabrada (Madrid), se observa a cinco chicos de 16 años sentados con las piernas estiradas y los calzoncillos bajados en el suelo de un salón. Se ven las sillas apartadas en un lado junto a la mesa, un cenicero con cigarrillos apagados, dos botellas de ron vasos medio llenos. Tres chicas, también menores, apura un trago antes de empezar y una de ellas pone el cronómetro en el reloj. La que lo graba todo no para de reírse. Las chicas se desnudan de cintura para abajo y se sientan encima de tres de los chicos forzando la penetración sin preservativo. A los 30 segundos cambian de pareja. Y así dos veces más. El vídeo termina. El juego no. Lo hace minutos después cuando uno de los chicos eyacula. Ha perdido.

Imagen: El Mundo
Según fuentes médicas del servicio madrileño de salud los embarazos no deseados son imposibles de comprobar, pues ellas no lo cuentan. Lo que sí es cierto es que se han encontrado más casos de adolescentes con enfermedades de transmisión sexual según las estadísticas elaboradas.
RIESGOS Y CONSECUENCIAS 


Trauma sexual
Estamos hablando de menores de edad, y el sexo no es libre si no siguiendo unas reglas, o forzados por la situación o presión del grupo. Puede estar seguido de un sentimiento de culpa o depresivo simultáneo al posterior arrepentimiento.

Consumo de drogas
Utilizadas para la desinhibición física y psicológica, tanto de alcohol como de otras sustancias. Probablemente, muchos de los que deciden participar en este tipo de juegos no siempre se sienten completos psicológicamente al hacerlo. Por eso necesitan estimulantes externos para imaginarse que lo están pasando bien y sentirse eufóricos.

Enfermedades de transmisión sexual
Al practicar sexo sin ningún tipo de seguridad. Aunque se hiciera con preservativo para las mujeres es más peligroso, pues como ellas son las que rotan, están entrando en contacto constante con las secreciones vaginales de las demás. VIH, hepatitis C, gonorrea, sífilis, virus de Papiloma Humano (VPH) u otras infecciones vaginales como la candidiasis...
Al estar al comienzo de sus vidas sexuales, los adolescentes no suelen acudir de forma regular al médico especialista, no se someten a pruebas de detección de enfermedades sexuales y no tienen completa consciencia de lo que una enfermedad de transmisión sexual puede llegar a provocar. 

Desgarros vaginales y problemas de eyaculación
El juego del muelle obliga a las mujeres a comenzar un coito directamente con penetración, lo que es totalmente contraproducente para su salud de las mujeres. Puede producir vaginismo, es decir, desgarros y heridas en la vagina, ya que se encuentra contraída en el momento de la penetración. Esto puede afectar a la salud sexual de las mujeres a medio y largo plazo, impidiéndoles tener relaciones sexuales en el futuro con normalidad, pues la pared vaginal queda dañada. 
En cuanto a los hombres, además de un incorrecto aprendizaje sobre lo que significa tener relaciones sexuales, físicamente les puede afectar a medio y largo plazo en su función eréctil. El hecho de que tengan relaciones de esta manera, intentando tener un control de la eyaculación en un entorno inadecuado para una relación sexual saludable, puede producirles problemas de erección que les afectarán en el futuro.

Embarazos indeseados
Los adolescentes aún no comprenden las consecuencias de esto, y piensan que no pasará nada.

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Pues alguno de los practicantes puede estar grabando y distribuir el material posteriormente por internet o medios similares. Problemas legales para los receptores de vídeos o imágenes que se reenvien posteriormente. 

No hay que crear alarmismo pues como citan las fuentes no es una práctica normal ni habitual, y de momento sólo se sabe de casos muy aislados. De todas formas conviene estar al tanto de las últimas tendencias de los jóvenes.

Fuentes:
El Mundo
La Razón
La Opinión
Ellahoy.es
Antena 3 TV
La Sexta

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